LA PIZARRA TÁCTICA
Dembélé desviste al Madrid
En una noche con más envoltorio táctico que fútbol la antagónica finalización de uno y otro decidió el pase a la final. El Madrid se puede ir con la sensación de que ha sido superior en muchos minutos de la eliminatoria al Barcelona, pero su añoranza de Cristiano parece interminable como cabía esperar. Solari y Valverde plantearon un partido en el que miraron más al rival que a sus propios equipos. El técnico argentino se la jugó con su bloque de confianza e incidió en los aspectos defensivos para alejar al Barcelona de su portería. El Madrid se asentó en posiciones avanzadas, aunque no presionó con el hambre de otras ocasiones. Era una maniobra de pura contención. Las parejas estaban marcadas desde el vestuario: Kroos con Busquets, Modric con Rakitic, Casemiro con Messi, Lucas con Alba, Carvajal con Dembélé... La estrategia de Valverde reveló también su obsesión por no permitir al Madrid lanzarse con espacios. El Barça actuó con un 4-4-2 en fase de posesión rival y renunció a apretar su salida para acortar el campo e impedir las contras blancas.
Le salió mejor el plan al Madrid durante mucho tiempo. Las pérdidas del Barcelona en lugares delicados y el buen hacer de Vinicius, atacando los huecos interiores para desactivar las posibles ayudas de Sergi Roberto a Semedo, construyeron varias oportunidades claras de los de Solari, casi todas mal resueltas por el brasileño. El Barcelona se dedicó a esperar su momento y le llegó con Dembélé. El jugador galo se había peleado con el balón en el primer tiempo (17 pérdidas), pero fue el líder tras el descanso. El Barcelona brotó a partir de sus desmarques y Luis Suárez pudo restablecer su relación con el gol. La misma que antes tenía el Madrid y ahora no. Se fue a Turín.
Vigilancia individual
Carvajal seguía a Dembélé para no facilitarle girar. Esa decisión ordenada por Solari, satisfactoria en el primer tramo del encuentro, condicionó el 0-1. El lateral salió de zona y el extremo azulgrana ganó su espalda con campo libre por delante.