El Wanda Metropolitano comenzó ante el Dortmund la leyenda que tenía el Vicente Calderón: convertirse en un campo que asusta a los rivales, un estadio que nadie quiera visitar y que viendo el apoyo de las gradas, los rivales salgan con el miedo metido en el cuerpo. Además, los aficionados pudieron disfrutar de la mejor versión del cholismo en esta temporada y la fiesta fue total. No es extraño que para las visitas de Athletic y Barcelona se estén a punto de agotar las localidades, que los llenos estén garantizados y que este Atlético, el que jugó contra el Dortmund, pueda soñar con todo esta temporada. Incluso con esa Champions que sigue siendo el gran sueño del Atlético. Con noches como la vivida ante el equipo alemán todo es posible.

El saldo negativo siguen siendo las lesiones. No es de recibo que en apenas una semana caigan hasta siete jugadores y la mayoría por lesiones musculares. Tanto el Cholo como en especial el profe Ortega tienen que revisar su plan de preparación física y no es válido apelar al cansancio de los partidos de las selecciones. Es el momento de reflexionar y, si es necesario, tirar de la cantera, pues está rindiendo a un gran nivel, como han demostrado Borja Garcés o Montero. El Atlético ha comenzado el buen camino y no debe desviarse. Debe ser valiente ante su gente y con Saúl, Rodrigo y Griezmann como estandartes se anuncian muchas alegrías. Ya sólo falta que Costa recupere su olfato goleador. Este Atleti puede hacer historia.