Veremos al Madrid de la 13ª

En Tallin será parecido a lo que vimos en Kiev. Claro que no olvido que faltará Cristiano, que es mucho faltar. Pero si evaluamos que en la final de la capital ucraniana el portugués tuvo un partido muy gris y se quedó en un plano secundario, podríamos concluir que mañana veremos ante el Atleti un Madrid muy similar al último que dirigió Zinedine Zidane. En la portería no espero sorpresas, porque con Keylor se ganó esta Champions y la Supercopa de Europa es el premio para los que han ganado la máxima competición continental. Courtois puede esperar unos días más.

El resto del equipo será el de gala, con la única inclusión del mallorquín Asensio por Cristiano y la suplencia lógica de Modric, al estar muy corto todavía de preparación tras regresar de su triunfal Mundial en Rusia. Este equipo juega de memoria y es la mejor fórmula para plantar cara al rocoso Atleti del Cholo. Además, gozamos de una baza psicológica favorable. En España, ellos nos dan para el pelo en las últimas temporadas, pero en Europa les tenemos comida la moral. En Tallin habrá momentos que recuerden a Lisboa y a Milán. El fútbol es psicología. Y en Europa, el Madrid habla en voz muy alta. Soy bastante optimista.