La misma Francia, el nuevo fútbol

Francia es campeona del mundo y Deschamps, historia viva del fútbol. El técnico galo igualó a Zagallo y Beckenbauer como los únicos capaces de levantar el título siendo jugadores y luego entrenadores. Tiene mucho mérito lo de Deschamps. Su convocatoria no dejó indiferente a nadie, porque entrañaba riesgos. Dejó fuera de la lista a Rabiot, Payet, Coman, Martial o Lacazette e introdujo a gente más joven y fresca. Entrañaba riesgos su apuesta, pero le salió bien. Con una media de 25,5 años, es el equipo más joven en ganar un Mundial desde 1970. 

La lectura de Deschamps va más allá de este torneo. Aquella derrota en la final de Saint Denis le hizo ver que el fútbol actual premia más a quien contrataca que a quien ataca. Francia se olvidó del balón y apostó por la estrategia y los espacios. Este Mundial ha sido, precisamente, el de la estrategia y lo espacios. Con un 39% de posesión fue capaz de doblegar a Croacia, como había hecho antes con todos sus rivales. Se adelantó a balón parado, otro de sus puntos fuertes, lo mismo que en octavos, cuartos y semifinales. El fútbol ha cambiado y había que adaptarse. Nadie lo hizo mejor que Deschamps, justo campeón como toda Francia. Félicitations!