Rubiales: a hierro mata y a Hierro muere...

Rubiales ha hecho de la necesidad virtud. Según mi criterio, ha acertado plenamente destituyendo a Lopetegui. No tenía más opción. Julen no podía seguir porque ha perdido el liderazgo del grupo. Un líder que se pasa meses advirtiendo que nada ni nadie puede distraer del objetivo, que hace llenar las paredes con el lema 'vamos a hacer que ocurra' y que luego hace lo que ha hecho, deja de ser un referente y pierde credibilidad. El problema tenía cara y ojos: Lopetegui. Y una vez localizado, la mejor solución era la quirúrgica.

Además, sinceramente no creo que con Lopetegui se vaya a llegar más lejos en el Mundial que con Hierro. En las circunstancias sobrevenidas, más bien pienso que sería al revés. Hierro está comprometido. Los jugadores son los que ganan y pierden partidos y campeonatos. Lo importante es que estén centrados los Piqué, Ramos, Isco, Iniesta, Silva..., y con Lopetegui al frente era difícil que lo consiguieran porque se había convertido en un elemento distorsionador.

Ahora, con Julen de regreso a España, la Selección se aleja del problema. Nos centramos en el partido con Portugal, y en el resto del Mundial. Si España gana el campeonato será mérito de su plantilla, de Rubiales y de Hierro, y si lo pierde todos nos volveremos a acordar de lo que ha pasado estas últimas 24 horas. Sea lo que sea, lo que hace falta ahora es unirse de nuevo y desearle a Hierro toda la suerte con España.