Glorioso Quintete

Un año para enmarcar. 2017 se escribirá en letras de oro en la próxima enciclopedia que se haga del Real Madrid. Un año que ha hecho historia. De los 115 que tiene el mejor club de todos los tiempos, jamás había alcanzado cinco títulos en un año natural. Desde que el 21 de mayo se ganase al Málaga de Míchel la Liga 33 en La Rosaleda (0-2), han ido cayendo conquistas como rosquillas. El 3 de junio fue la Duodécima en Cardiff. El 8 de agosto la Supercopa de Europa en Skopje (Macedonia) ante el Manchester de Mourinho (2-1). El 16 de agosto en el Bernabéu la Supercopa de España en el partido de vuelta ante el Barça (2-0). Y el Quintete de Oro se consumó en Abu Dhabi ante el Gremio brasileño en otro partidazo de ese talismán llamado Zinedine. Un Quintete en un año no lo logró ningún otro Madrid. Y añadan ustedes a esa cosecha imperial el Trofeo UEFA, el The Best y el Balón de Oro que se ha ganado de pleno derecho Cristiano, el jugador más determinante que hayan visto mis ojos y los de millones de madridistas. Valoremos como merece al portugués (algo que me da que no lo está haciendo el club). La última Champions llevó su sello con diez goles a Bayern, Atleti y Juventus. La Supercopa de España se empezó a ganar en el Camp Nou con un golazo nada más saltar al campo (el 1-2), la reacción liguera ha empezado tras la manita al Sevilla con un doblete suyo y el sexto Mundial de Clubes se consumó con un gol de oro suyo con una falta directa espectacular. Con Cristiano, yo duermo más tranquilo. El día que se vaya (ojalá sea lejano), le valoraremos en su justa medida. Renato, técnico del Gremio, debe estar arrepentido de haber dicho que él fue mejor que Cristiano. De ilusión también se vive...

El Sextete está vivo. Ya les avisé que el Madrid afronta otro reto apasionante. Ningún equipo ha ganado jamás un Sextete en la misma temporada. De momento, la tropa de Zizou lleva tres de tres (las dos Supercopas y el Mundial de Clubes). Necesita ganar la Copa (de momento está en octavos, con una eliminatoria teóricamente asequible ante el Numancia), la Champions (está en octavos a la espera del cruce con el PSG) y la Liga. En esta última está rezagado a ocho puntos del Barça, pero si gana el Clásico el sábado en el Bernabéu y logra vencer en Butarque al Leganés en el partido aplazado a febrero, la desventaja quedaría en cinco puntos y todo por decidir. El Sextete vive. Impossible is nothing.

Modric, ‘Gold Ball’. El croata se llevó el Balón de Oro del Mundial de Clubes (Cristiano se quedó con el de Plata). Más que merecido. En Abu Dhabi vimos al Modric de Cardiff. Con su nivel físico recuperado, sacó de nuevo la chistera y ese fútbol que lo convierte en un futbolista de culto. Modric se comió al Gremio y estuvo a punto de marcar un golazo. Con Luka a tope de nuevo, este Madrid de las diez finales consecutivas y que ha ganado más Mundiales que Brasil (seis a cinco) no tendrá techo...

La portada del AS. De chaval vi cómo se hacía famosa la frase del abuelo de Majaelrayo, uno de los pueblos de pizarra de Guadalajara. ¿Y el Madrid, qué? ¿Otra vez campeón de Europa? Ahora cambien Europa por el Mundo y les saldrá la portada del AS. Rey de Reyes. Me lo recuerdan felices los peñistas de La Séptima de Baiona (Pontevedra), La Quinta del Buitre de La Vall d’Uixó (Castellón), así como Jaime y su mujer Mari Pepa, que han celebrado el Quintete junto al 25 aniversario de su boda. ¡Cómo no te voy a querer!