¿Quién ganará el Mundial de MotoGP?
Ya sabemos que en el deporte esto de la lógica dista mucho de ser una ciencia exacta e incontables son los casos que así lo refrendan.
Es la pregunta recurrente de las últimas dos semanas. Me la han hecho en un taxi, tomando café en el bar, en el embarque de un avión, amigos... ¿Quién ganará el Mundial de MotoGP? Agradezco la generosidad de quienes me consideran experto en la materia y por ello, precisamente, lamento carecer de una respuesta convincente al respecto. El sentido común señala a un favorito indiscutible, no es otro que un líder tan solvente como Márquez. Sin embargo, ya sabemos que en el deporte esto de la lógica dista mucho de ser una ciencia exacta e incontables son los casos que así lo refrendan. Dovizioso lo tiene muy crudo, es evidente... pero cosas más extrañas se han visto en las carreras. En ello radica una parte de su grandeza, en que nadie debe sentirse triunfador antes de tiempo.
El español depende de sí mismo, algo que supone una ventaja valiosa. Acabar entre los once primeros es, desde luego, un resultado más que accesible para Marc... siempre que no se caiga. Y no debemos olvidar que, con el de hoy en Cheste, lleva ya 26 talegazos en lo que va de temporada, así que se trata de una circunstancia que podemos calificar de muchas maneras menos de extraordinaria. Por supuesto que su ventaja le permite ser conservador y que en condiciones normales nada debería inquietarle, pero insisto en que hablar de normalidad en estos casos resulta atrevido. Dovizioso tiene que ganar y además esperar el desastre de Márquez, una combinación poco probable pero no imposible. Confío en nuestro campeón y apostaría por él... aunque mantendré los dedos cruzados hasta el domingo.