Mucho Madrid para el plan temerario de Bosz

Al galope. La terapia de la Champions reanimó a un Madrid reconocible y en estampida. En un partido desgobernado en diferentes fases, asomó la naturaleza de contraataque del Madrid, el mejor equipo en el ida y vuelta, ante un Borussia de más cartel que posibilidades.

Riesgo local. El tono imprudente del conjunto de Bosz, con una defensa excesivamente adelantada y en Babia, suscitó el trazo más imponente de Bale, productivo como siempre que actúa en el margen izquierdo, y devolvió el gol que tanto necesitaba Cristiano. 

Modric y Kroos. Con el Borussia partido por el eje, aparecieron, una vez más, las figuras de Modric y Kroos (74 pases con más del 90% de acierto) para sacar de punto al mediocampo alemán y engendrar los ataques del conjunto de Zidane.

Descontrolado. Se pueden poner un reparo al triunfo del Madrid. El gol de Aubameyang le tensó y no se apoyó en el sentido común con ventaja en el marcador. Sirvan de ejemplo las carreras desbocadas de Ramos. El partido degeneró en un peligroso golpe a golpe del que salió airoso.

Los problemas en la presión del Borussia

Ningún futbolista alemán encimó a Carvajal en el primer gol del Madrid. Tampoco Piszczek marcó a Bale, cuyo golpeo extraordinario resolvió la jugada.

Situación parecida en el 0-2. Kroos, sin oposición, estiró al equipo de Zidane con un pase al espacio para Bale. Cristiano no perdonó ante el centro del galés.