La campaña anónima de Bordalás

Desde el mismo momento en el que llegó a Getafe, Bordalás caló la piel de los hinchas. La afición azulona se entregó a él porque en dos días sacó al equipo del penúltimo puesto al que había caído con Esnáider. Fue entonces, hace ahora casi ocho meses, cuando alguien comenzó una campaña anónima pegando carteles por las calles de la localidad en los que se veía dibujado el rostro de Bordalás y un lema: “Llévame a Primera”. Aquello parecía una cosa de locos, demasiado valiente, demasiado pronto.... Hoy, los carteles se buscan para ser guardados como recuerdo, de tótem.

Bordalás ha logrado en Getafe lo que Simeone consiguó en el Atlético. El aficionado está convencido de que este tipo de entrenador logra los éxitos más allá del futbolista que tenga a sus órdenes. Parte de verdad hay, pues Bordalás metió al Alcorcón en el playoff de ascenso, el año pasado subió al Alavés (fue premiado con el despido) y hasta aquí ha traído al Getafe cuando lo recogió penúltimo. Aquí es Tenerife, una ciudad que en el Madrid futbolero despierta sentimientos encontrados. Unos prefieren no mencionarla, a otros les sirve para hacer mofa y luego están los aficionados del Getafe, que no olvidan ni olvidarán que fue allí, en Tenerife, donde lograron su ascenso a Primera, en aquel 3-5 con cinco goles de Pachón.