NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

RAÚL ROMOJARO

Michelin debe reaccionar

No creo que este protagonismo sea positivo para el campeonato, los neumáticos son importantes pero no deberían ser determinantes.

Resultado inesperado el de MotoGP en Montmeló. No ganó el favorito Pedrosa porque lo hizo un sorprendente Dovizioso, que para nada contaba en los pronósticos. Sumado ello al desastre de las Yamaha y a cómo Márquez ha sabido sacar petróleo de donde no lo había, parece claro que la incertidumbre ha sido la tónica de una interesante carrera. Es así básicamente porque los compuestos que Michelin facilita a los equipos este año son bastante impredecibles, en ocasiones favorecen a unos y en otras, a los contrarios. No creo que este protagonismo sea positivo para el campeonato, los neumáticos son importantes en la competición pero no deberían ser determinantes, capaces de modificar incluso el desarrollo lógico de los acontecimientos.

Si alguien puede revertir esta situación es la marca francesa. Confieso que soy incondicional de Michelin, por la calidad de sus productos y un prestigio avalado por la más avanzada tecnología en la producción de neumáticos. Y por este mismo motivo pienso que deben ponerse manos a la obra para conseguir que, lo antes posible, las cubiertas de MotoGP se muestren a la altura de lo que exige un certamen de tan alto nivel. La estabilidad de los compuestos, su homogeneidad a lo largo del tiempo, tanto en cada gran premio como durante el transcurso completo de las carreras, se antoja un desafío inexcusable para los franceses. Si un día se quejan unos y al siguiente lo hacen los otros, es que algo va mal. Influir de este modo en los resultados no es lo deseable para un proveedor del Mundial.