Borrón y cuenta nueva

Esta parecía una ocasión idónea para que el Eibar sorprendiera al Real Madrid. Los blancos llegaban a Ipurua sin Cristiano Ronaldo ni Bale, sus dos principales figuras, y habiendo perdido su liderato provisional tras empatar ante Las Palmas entre semana.

Además, los armeros estaban atravesando un gran momento de juego últimamente que les hacía plantearse mejorar la hazaña que firmaron hace cinco meses puntuando en el Bernabéu y alcanzar las posiciones europeas.

Sin embargo, saltaron al campo cohibidos y el Madrid no necesitó mancharse la camiseta para imponer su ley. Eso sí, demostró una capacidad de trabajo que teóricamente era más propia del conjunto local. Los menos habituales supieron aprovechar bien esta oportunidad. En apenas media hora lo dejaron todo sentenciado.

El Eibar tuvo una mala tarde, pero este partido no debería empañar la magnífica temporada que está completando. Ya ha garantizado prácticamente su permanencia en Primera División otro año más. Eso es vital para ellos. A partir de ahí, pueden soñar y disfrutar tranquilos. Cualquier cosa será bienvenida.