Aduriz y el remate certero
Aduriz volvió a demostrar ante Macedonia una cualidad que define su estado de forma, que necesita muy poco tiempo para golear. El delantero del Athletic apareció en Granada para suplir a Morata, no tenía mucho tiempo por delante, apenas pudo entrar en contacto con el balón, pero no le hizo falta. Aprovechó su rato para cerrar la goleada y acompañar la gran jugada que protagonizaron Isco, Silva y Vitolo que intervino sin tocar el balón.
Tanta calidad necesitaba un remate certero. Y a preciso casi nadie gana a Aduriz, que ha explotado cuando los futbolistas enfilan el camino de la retirada. Debutó hace seis años con la Selección y apenas ha jugado una decena de partidos. Ni la falta de continuidad ni la edad es un contratiempo para él. Al contrario. La suya nunca ha parecido una presencia segura con España, nunca la ha reclamado, pero se la merece. Es el goleador necesario.