Vettel merece una sanción

Necesitamos a gente como Verstappen, también a gente como Vettel. Hablo de su pilotaje, de las ganas de adelantar a los rivales, sí o sí. Y necesitamos, o al menos agradeceríamos, que las conversaciones por radio sigan desvelándose, trascendiendo, llegando al sofá de casa. En tiempos en los que Twitter o Facebook forman parte de nuestro desayuno, comida y cena, no hacer públicos los comentarios de los pilotos en plena carrera nos llevaría a una Fórmula 1 light. De pavo. Sin sal.

Insulto a Alonso

Eso sí, se agradecen las frases frescas (espontáneas) de unos, como la de Alonso cuando le pedían el 150%: "Empuja ahora", le comentaban. Y él contestaba al ingeniero: "Llevo empujando desde la vuelta 1, peleando con tráfico. Haz tu trabajo y yo haré el mío". Directo. Pero no las de otros como Vettel, que perdió la educación: "Este es un mensaje para Charlie (Whiting, el Director de Carrera): ¡Vete a la mierda, vete a la mierda!", soltaba visiblemente enfadado por lo ocurrido con Verstappen. Y eso, después de que el viernes, en la segunda sesión de libres, se quejara de Alonso con este dechado de elegancia: "Vaya un idiota". Da igual si Sebastian tiene cuatro títulos mundiales o si la crisis en Ferrari la hace avergonzarse hasta un rojo más rojo que el de su monoplaza. Merece una sanción ejemplar por parte de la Fórmula 1. Se puede hablar, sí, pero sin apuradas de frenada como las del fin de semana en México.