Oblak ya no está solo
Hasta ayer, el más internacional de los eslovenos era Oblak, el portero del Atlético. Eslovenia, con poco más de dos millones de habitantes, era un país colchonero por cariño al portero rojiblanco. También el nuevo presidente de la UEFA, Ceferin, tiene simpatía por el Atlético por este mismo motivo. Ahora se ha convertido en el compatriota más influyente en el ámbito internacional. Y seguro que Oblak, un héroe en el país, se lo agradece y lo comparte.
Ceferin tiene buena reputación en Eslovenia porque trabaja en el despacho de abogados más importante del país. Es cierto que lleva poco tiempo en el mundo del fútbol, desde hace poco más de cinco años. Curiosamente, cuando resultó elegido como presidente de la Federación de Eslovenia, el observador que envió la UEFA para garantizar la limpieza en los comicios fue su rival de ayer, Van Praag. Hace sólo un lustro el holandés llegó como representante de la autoridad. Ayer su discípulo le abrumó en las urnas. Esto dice mucho del hartazgo en las federaciones nacionales con los antiguos rectores de la UEFA.
De momento Ceferin estará en el cargo hasta 2019, para completar el mandato que no ha podido agotar Platini. Tiempo suficiente para tomar el control de la organización y dejar su impronta. Es un hombre con personalidad, trabajador y con decisión. No será un títere y trabajará para hacer el fútbol más democrático y mejor.
A. Bakic, periodista de la TV pública eslovena.