Posible oportunidad de LaLiga con el Brexit
Ya sabemos el parecer de los ciudadanos británicos sobre su permanencia en la Unión Europea, los cuales han votado a favor del Brexit o salida. La realidad es que dicho referéndum no es jurídicamente vinculante para el Gobierno Británico aunque todo apunta que éste no tendrá más remedio que notificar al Consejo Europeo su intención de abandonar, acogiéndose al artículo 50 del Tratado de la UE.
El Brexit, ante todo, supone una total incertidumbre en cualquier ámbito económico y jurídico, en cuanto a las relaciones futuras del Reino Unido con el resto de países de la UE. La citada notificación de desconexión activará un periodo de dos años, en el cual el Reino Unido y el resto de países de la UE deben acordar la salida, sobre la base de un proceso de negociación. El resultado afectará a todos los sectores, incluido el deporte. A priori, hay aspectos regulatorios que desde una perspectiva objetiva puedan castigar inicialmente a la Premier y al resto de campeonatos. Es evidente que, en principio, los jugadores que ahora son comunitarios en el Reino Unido pasarían a ser considerados extracomunitarios. Afectaría de forma principal a la libre circulación de trabajadores de la cual todos nos beneficiamos en el territorio europeo y no podrían beneficiarse de la captación de talentos jóvenes sobre la base de las excepciones establecidas en la normativa FIFA para los países de la Unión Europea o del Espacio Económico Europeo. Ahora bien, dependerá de la capacidad y habilidad, no solo en la negociación de desconexión, sino en la propia adecuación que las instituciones deportivas británicas deban emprender con la finalidad de adecuar el sistema y de que el mismo, en el nuevo marco al que se enfrentarán, afecte y/o perjudique lo menos posible.
De este modo, si la Premier quiere seguir siendo competitiva, tendrá que modificar sus normas para adecuar su nueva situación, que también dependerá de los acuerdos que a nivel de país consiga su gobierno con la UE como realizaron algunos países en su día. Ni que decir tiene que, en cuanto a la participaciones de sus selecciones o de sus equipos en las diferentes competiciones internacionales, seguirán competiendo en las mismas condiciones, ya que ello depende de su reconocimiento por las instituciones rectores de dicho deporte, en este caso, la UEFA y parece, a priori, que a dicha institución le interesa mantener el status quo. De hecho, hay países que compiten sin necesidad de ser miembros de la UE. Basta con ser país asociado.
Los efectos de Brexit afectarán a todo el mundo y, como no podía ser de otro modo, también a España. La Premier no tendrá tan fácil contratar jugadores como ahora y perderá un cierto nivel competitivo con respecto a otras ligas y, en especial, a LaLiga, que le va pisando los talones. La realidad es que la contratación de jugadores españoles y/o entrenadores que en los últimos años han “emigrado” a tierras inglesas bajo el embrujo del poderío económico y con la base del talento deportivo que atesoran, a partir de ahora quizás se lo piensen un poco más, no solo por la reducción de su mercado, los problemas de tramitación de sus fichas, sino por el efecto que pueda provocar la posible inestabilidad de la libra o la inestabilidad del país en si. No se puede decir que sea un país actualmente cohesionado y el Brexit ha ganado por poco. La situación política puede incluso generar problemas internos a futuro o un cierto rechazo por futuras generaciones.
Para los clubes españoles también puede tener algún hándicap, dado que tendrán que revisar sus contrataciones a futuro de jugadores ingleses, por cuanto que deberán ser tratados como no comunitarios, suponemos que se fijará algún tipo de régimen transitorio para los contratados con antelación al Brexit, como es el caso de Bale. Pero, por otro lado, reforzará su capacidad de empleadores solventes en el mercado en el que compiten y lo más importante se abrirá un nuevo panorama de oportunidad para LaLiga que puede reforzar su posición de liderazgo, no solo deportivo en Europa que en los últimos años parece incuestionable, sino en cuanto a producto atractivo para todos los operadores del mercado, entre ellos, el mercado televisivo que no olvidemos que al final es de donde sale el dinero para pagar toda esta fiesta.
Javier Ferrero Socio Director SFA (Senn, Ferrero, Asociados Sport & Entertainment).