Faltó el desequilibrio de CR7

Portugal lo tiene todo. Un buen portero, laterales ofensivos, como Vieirinha, designado el mejor de la Bundesliga, centrales competentes como Pepe y Carvalho, un 4 descomunal en Danilo, fajadores como Moutinho y un tío de inmensa clase como João Mário, incluso refrescos como la tanqueta Renato. Adelante Nani empuja siempre y dicen que también tienen al mejor del mundo. Con todo eso se puede aspirar a títulos.

Sin embargo, ayer CR7 no puso el desequilibrio que necesita cualquier equipo campeón. Insistió sin descanso como es habitual en él, pero su ansiedad le quita puntería. Falló goles clamorosos, goles que si los falla Morata estaría ya en la hoguera. Pero es CR7, quizás mañana meta tres pero contra Islandia no hizo lo que se espera de él y lo único que precisa Portugal, desequilibrio. CR7 no inclinó la balanza. Un jarro de agua fría para una afición eufórica como nunca. El peligro es que Portugal caiga, como tantas otras veces, en el extremo contrario.