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10 PARTIDOS, 10 HISTORIAS

Keylor y la 'mejenga', el cadete del Atleti y 'Schuster Illarra'

La 'mejenga’ de Keylor Navas

Todo el mundo que ha tenido trato personal con Keylor Navas encumbra su pasión por el fútbol y su extraordinaria personalidad. “Es la clave de su éxito”, diagnostica Guillermo Trejos, director de la escuela ADEFIP en la que comenzó el portero madridista. “Es un líder, una persona muy valiente. Su amor por el fútbol le ha llevado hasta aquí. Siempre le veías en la plaza, daba igual la hora, en la mejenga (así se llama en Costa Rica al partidillo de la calle)”, añade el que fuera su entrenador también durante dos años. Keylor ya soñaba por entonces, como todo niño, con ser profesional. “Con el gusto y la ilusión que ponía se puede entender su progresión. En el Clásico jugó como lo hacía en la plaza. Es un orgullo para todos nosotros”, sostiene Trejos. El madridismo también abraza a Keylor Navas.

La Nike Cup de Nacho Monsalve

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Fue la sorpresa de Simeone. La multitud de bajas en la zaga invitó al técnico argentino a dar la alternativa a Nacho Monsalve. El canterano cumplió con nota en su estreno con el primer equipo. No fue un brindis al sol de Simeone. El Cholo le tiene en cuenta desde hace mucho tiempo hasta el punto de que ha participado en las tres últimas pretemporadas colchoneras. Monsalve llegó al Atleti en 2006 procedente del Rayo Majadahonda y en 2009 formó parte de un equipo que hizo historia en la cantera rojiblanca. El Atleti ganó la prestigiosa final de la Nike Cup Cadete con un conjunto dirigido por Pepe Fernández en el que destacaban futbolistas como Óliver, Manquillo o Saúl. “La base era la defensa. En la fase final que se disputó en Oviedo sólo encajamos un gol”, recuerdan desde el club. Monsalve alternaba el lateral con el centro de la defensa. “Está muy bien valorado en el club. Es un chico tranquilo, profesional y con mucho que decir”, señalan. “Aprovechó su oportunidad”, sentenció Simeone.

Las papillas de Nolito

Nolito, el rey de Sanlúcar, equilibró el derbi gallego con un gol magnífico. Su juego desprende el toque genuino de los artistas. Desde niño hacía cosas distintas y deleitaba a todo el que le veía en las pistas de fútbol sala de la Barriada Andalucía. “Tuve una infancia feliz”, afirma siempre el extremo del Celta. Fue criado por sus abuelos, a los que quiere como si fueran “sus padres”. Su abuela, en alguna ocasión, tuvo que pedir papillas a Cáritas para darle de comer. “Estoy muy contento y orgulloso con la familia que me tocó”, aseguró en una entrevista con ABC. Nolito no olvida sus raíces, expuestas en su forma de entender la vida y el fútbol.

La filosofía de Pako Ayestarán

Pako Ayestarán no pudo cambiar la dinámica del Valencia en su estreno en el banquillo. El conjunto ché sigue sumido en una profunda crisis y los puestos de descenso se acercan. Resulta complicado que el técnico vasco apuesta por su ideario futbolístico. “Lo importante es tener un estilo. Todos los técnicos me influyeron, pero también profesionales no tan renombrados como Esteban Gorostiaga o Iñaki Satrústegui. Luego, uno modela su perfil. Atiendo a los valores: el resultado no está sobre todo. Me gusta el juego posicional”, desgranó en AS en 2014. La tesitura en la que se encuentra el Valencia obstaculiza su hoja de ruta deseada. “Tampoco soy un iluso. Si no ganamos, me echan”, admitió. Necesita resultados urgentemente.

Aquella impresión de Lillo sobre Illarramendi

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Sensacional partido de Illarramendi en Sevilla. El centrocampista de Mutriku destacó en el doble pivote y resultó demoledor a balón parado. En 2008 ya se manejaba con la misma pulcritud. Lillo se quedó prendado de él con un único entrenamiento. “La primera vez que le vi dije: 'Anda, ha venido a jugar Schuster a Zubieta'. Fue un flechazo”, asevera el técnico. Era habitual ver a Illarra entrenarse con el primer equipo, aunque Lillo no le hizo debutar. “Era muy joven todavía (18 años) y no hubo ocasión”. Illarramendi ya ha olvidado su etapa en el Real Madrid. En Anoeta ya le vuelven a comparar con Schuster.

Marcelino, Adrián y la inteligencia

Adrián vuelve a disfrutar en el Villarreal. Su estancia en el Oporto no fue la soñada y en verano había que decidir el paso próximo a dar. Marcelino se empeñó en su fichaje. El técnico asturiano estimaba las condiciones técnicas del delantero, pero especialmente valoraba su inteligencia en el terreno de juego. Quería un hombre de ataque distinto. “La perseverancia de Marcelino fue decisiva. En el club no todos estaban de acuerdo con esta operación”, explican desde el Villarreal. Marcelino conocía a Adrián desde sus inicios en el Covadonga, entidad de la que también salieron Cazorla y Colunga.

Fran Escribá, funcionario de justica

La derrota en Vallecas amenaza el futuro de Fran Escribá. Parece que Ángel Torres le sigue teniendo confianza, al menos hasta el partido contra el Villarreal. El técnico valenciano cree ciegamente en la salvación. Nunca se ha conformado. Un ejemplo sirve como referencia. Escribá aprobó las oposiciones de funcionario de Justicia, trabajo que compaginó durante un tiempo con su cargo de entrenador en la escuela del Valencia. “Tuve que pedir la excedencia. No me llenaba la labor de funcionario. Necesito algo más y no me gusta la seguridad”, comentó en más de una ocasión. El Getafe no está ahora, precisamente, en una posición desahogada.

El Athletic rechazó dos veces a Gurpegui

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Valverde confirmó lo previsto. Carlos Gurpegui fue el sustituto del lesionado Laporte. Ya se han cumplido 14 años del debut del capitán del Athletic. Le costó ser reclutado por los técnico de Lezama. El futbolista de Andosilla fichó por el club bilbaíno con 17 años. Cumplió el dicho de que “a la tercera va la vencida”. El Athletic le había llamado antes dos veces para que realizase las pruebas, pero en ambas fue rechazada. La siguiente oportunidad no la dejó escapar. La constancia, el mejor aval de Gurpegui.

Camarasa y su salida del Valencia

A los despachos del Levante no paran de llamar preguntando por Víctor Camarasa. El nombre del internacional Sub-21 aparece en la agenda de multitud de clubes de la Premier League y de otros de la Liga BBVA. El club granota está obligado a mover ficha si quiere retenerlo. Camarasa necesita sentirse valorado. El centrocampista estuvo en la cantera del Valencia hasta juveniles, cuando fue cedido al Cracks. Completó una gran temporada y el conjunto de Mestalla quería que regresara. Camarasa no estaba en esa línea. Pidió la baja por no sentirse apreciado y no paró hasta forzar su salida. El Levante anduvo rápido entonces. Ahora, en cambio, Al club granota no le queda mucho tiempo de reacción.

Ricca se mira en Zanetti

Dos partidos le han servido para entusiasmar a la afición del Malaga. Federico Ricca, lateral uruguayo que aterrizó en La Rosaleda durante el mercado de invierno procedente del Danubio, se ha acreditado como un marcador férreo con soltura en campo contrario. Cualidades que también mostraba su espejo futbolístico: Javier Zanetti. El Atleti tuvo casi atado a Ricca hace un año, pero el traspaso finalmente no se produjo. El Málaga se ha hecho con un jugador de gran proyección.