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Azkargorta suma otro despido

El Bigotón. Seguía ahí, a los 63 años, impartiendo clases en ese fútbol boliviano que hace tiempo decidió adoptar como suyo. Ahora por abajo, sólo a 400 metros sobre el nivel del mar, en Oriente Petrolero, el penúltimo clasificado de su Clausura. Cansado de tanto empate, el club anunció su salida, tras ocho partidos (y ocho puntos) de campeonato y la eliminación de la Libertadores en la fase previa, con un frío y escueto comunicado a través de su cuenta de twitter: “El profesor Xabier Azkargorta ya no es más director técnico del Oriente Petrolero. El DT y el directorio acordaron su salida”. La 14ª estación en la carrera del Bigotón ya es historia.

Juliana Rodríguez. Tiene 27 años y el título oficial de técnico profesional de fútbol en Argentina. También una historia en España, como futbolista: no la aceptaron en el Barcelona por complicaciones burocráticas, pero sí jugó en el Sevilla, hasta que una lesión de rodilla la jubiló precipitadamente a los 21 años. Luego empezó a ejercer de entrenadora y a enfrentarse a un problema clásico. “En España dirigí hombres y tuve que lidiar con padres que no compartían mis formas de trabajo o que me descalificaban por ser mujer”, recuerda. Hoy en Río Negro, Argentina, Juliana Rodríguez sortea con aplomo una insólita experiencia: dirige una escuela de técnicos. Una profesora, una pionera.

River-Boca. El gran partido de Argentina, el clásico de los clásicos en Sudamérica, terminó siendo una castaña. Por una vez en son de paz, sin disturbios fuera ni peleas callejeras dentro, pero una castaña. Más bostezos que jugadas y goles. Más expectación que realidad. Un poco de intensidad inicial, más ocasiones y presencia de River, pero en general muy poco, nada. Terminó 0-0, a la altura de la pobreza que ambos equipos están mostrando en lo que va de Liga. Superclásico decepcionante.

Pinola. Puede presumir de haber jugado en el Atlético. O más bien de haber depositado en el Calderón sus derechos federativos durante unos cuantos años. Porque Javier Pinola apenas jugó dos partidos en el primer equipo, y con Manzano en el banquillo, y poco más de una docena en el B. El resto, ilusiones de verano y un cúmulo de temporadas a préstamo en otros equipos. Pero hoy, aquel lateral izquierdo usado en el Manzanares como carne de cesión, se ha convertido en la gran sorpresa del Tata Martino para los próximos compromisos de su selección. Con 33 años, Pinola es referente en la defensa de Rosario Central, el líder de la zona A de la liga argentina. “Me temblaron las piernas”, confesó el ex rojiblanco al conocer la convocatoria de la albiceleste.