Historias que mueven corazones
Ayer desayunamos en AS con la gran familia del Comité Paralímpico. Entre ellos se encontraban dos deportistas de altísimo nivel, la nadadora Teresa Perales y el lanzador de peso y disco David Casinos. Cuando en AS hay visitas se nota en el ambiente: cámaras, flashes, saludos… La de ayer era, sin duda, una visita muy especial. Una visita con perra-guía incluida, la disciplinada pero afable ‘Farala’. Un compañero de la sección del Real Madrid, Agustín Martín, no pudo evitar preguntarme, con una indisimulada admiración: “¿Esa chica era Teresa Perales? Qué pena, me hubiera encantado saludarle y hacerme una foto con ella. Es una crack”. Medallas aparte, Teresa y David son la muestra de un tipo de deportistas que dejan huella, que llegan a la gente. Ellos lo saben.
Teresa habló de las dificultades añadidas a las que se enfrentan a diario los deportistas paralímpicos, que hacen que su esfuerzo se multiplique. Nos dejó a todos con la boca abierta al relatarnos cómo tarda 30 minutos en ponerse, sin ayuda, un bañador. David reconoció que las suyas son “historias que mueven corazones y que la gente necesita”. Nos hablaron de los Juegos de Río, de su esfuerzo, de sus metas, de las medallas que aspiran a colgarse... Estuvieron en AS un par de horas, pero les bastaron unos minutos para conquistarnos con sus historias, esas que necesitamos a diario simplemente para aceptar la vida tal cual es, una gran competición deportiva plagada de obstáculos en el camino. Historias del deporte y de la vida en su estado más puro.