Una venta del Granada a la vista
El mercado de fichajes ha dejado al descubierto que el Granada cambiará pronto de manos. El propietario Gino Pozzo, dueño también del Udinese Calcio y del Watford de la Premier, está decidido a vender el Granada más pronto que tarde. Traspasarse a sí mismo a Peñaranda, del Granada al Watford, es una muestra más de que piensa en su proyecto de la Premier, que es donde le gusta y donde quiere estar, y una forma velada de asumir que el Granada pronto no será de su propiedad, de ahí el trasvase de talento. Mejor Peñaranda aquí que allí, por lo que pueda pasar, no vaya a ser un punto de conflicto a la hora de negociar la venta de la entidad. Ahora el único objetivo del empresario italiano es mantener al club andaluz en Primera para que no se devalúe y luego cerrar alguna de las ofertas que tiene sobre la mesa. Pero hace ya meses que el proyecto dejó de crecer y en su cabeza se ha acabado imponiendo el sueño londinense.
Y mientras el Watford ha tirado con pólvora de rey asumiendo pagos millonarios como la cláusula de Amrabat, el Granada se ha reforzado como buenamente ha podido, con cesiones de melones cerrados o futbolistas cercanos a los 35 años. El trabajo que ha realizado Juan Carlos Cordero al frente de la dirección deportiva ha vuelto a ser estupendo, sobresaliente, muy por encima del presupuesto con el que ha contado, que es cero. Ha incorporado cinco futbolistas y ha dado salida a aquellos que poco o nada aportaban ya, incluida la difícil papeleta de despedirse de Piti, que empezaba a ser una china en el zapato.