Un contrato pendiente. Saca pecho el FC Barcelona porque ha ganado cinco títulos este año, pero se da la paradoja que este éxito, de momento, le cuesta dinero al club. Las primas por los espectaculares éxitos deportivos logrados el 2015 han debilitado la caja de la entidad hasta el punto de que el club se ha visto impotente ante la demanda de 18 millones de euros que solicita el Celta por vender a Nolito, el jugador que Luis Enrique considera el complemento perfecto para cerrar una plantilla que ha demostrado que cuando se pone en faena es casi imposible de doblegar. Para traer el refuerzo que pide un entrenador que lo ha ganado casi todo no queda otra que cerrar el contrato pendiente con Qatar y que la inyección de millones llegue lo antes posible.

Tira y afloja. Las relaciones entre el Emirato y el Barcelona serán objeto de estudio por parte de las escuelas de negocios. Es sorprendente como el club más ganador de la década y uno de los tres más populares del planeta no acaba de cerrar un acuerdo con un patrocinador que anda loco porque su nombre se relacione con el mejor fútbol del mundo teniendo en cuenta que hay un discutido mundial que se debe celebrar ahí en el invierno de 2022.

Recelos mutuos. Esta es la historia de una relación en la que dos negociadores que son absolutos triunfadores no quieren ceder un palmo de terreno y se aferran a lo que sea para sacar el máximo provecho del que debería ser su socio, pero al que acaban viendo como un rival en potencia. El Barça, que había cerrado un acuerdo con Qatar antes de las elecciones, cree que debe de ser el club mejor pagado del mundo y los qataríes no ceden porque ahora les quieren cambiar lo pactado y además se saben impopulares en la masa social barcelonista. Además, no hay que olvidar que Qatar ha puesto los huevos en dos cestas: el PSG y el Barça. En el primero son propietarios, en el segundo, patrocinadores. Alguien en el Emirato les ha hecho ver que no se puede reforzar a un rival directo y que los huevos deben de ir sólo a una cesta. La francesa.

Tiempo límite El acuerdo no puede demorarse más. Antes de Reyes, el Barça debe de cerrar negociaciones y un acuerdo para llevar a la asamblea. Por algo los Reyes llegan de Oriente.