Iñaki es pata negra, diferencial
Iñaki Williams es pata negra, un futbolista diferencial. Nadie se atreve a decir que ha visto un león más rápido en su vida. Valverde, Aduriz mediante, le sitúa en la banda y no hay quien le frene al espacio. Bueno sí, otro privilegiado físico como N’Diaye le ganó una carrera el domingo. Lo más esperanzador es que Williams apunta a ser un nueve. Y el Athletic lo necesita. Aduriz parece eterno, pero digo yo que algún día se le acabará la batería. Iñaki tiene gol, se mueve con instinto matador en el área.
Aunque existan los lógicos tiras y aflojas en la negociación, habrá entendimiento. Todos saben que lo mejor para el futbolista, al que plantilla y técnicos aprecian con locura por implicado y alegre, es seguir de león varios años más. A sus 21 años, es difícil que un club deportivo del nivel del Athletic le pueda ofrecer tantos partidos como los que juega. Además, los Williams son dos, que su hermano Nico es una de las perlas del infantil, cultivada en Lezama desde mucho más joven.