Simeone busca un nuevo Atleti

Anda Miguel Ángel Gil muy encima de Simeone las últimas semanas. Estuvo en el entrenamiento del lunes para arropar a su entrenador. Quiere que sienta el apoyo del club en el momento que está montando un nuevo Atleti. No es sencillo hacer un equipo que funcione y compita con un cupo de altas y bajas que supera los ocho futbolistas de media cada verano y que ya ha llegado al núcleo duro del vestuario con Raúl García, Miranda o Arda Turan. Es difícil hacerlo cuando debes cambiar tu sistema porque en el 4-4-2 que te ha dado el éxito y los títulos no cuadran bien los refuerzos que por su perfil rendirían más en un 4-3-3. Ese es el caso de Carrasco, Correa, Griezmann o Jackson. Cambiar los hábitos y los automatismos que te han hecho triunfar para jugar de otro modo no es fácil. El Atleti se encuentra en medio de ese reciclaje y de ese reto que ha asumido el Cholo al solicitar y aceptar todos los fichajes (el club le ha traído lo que pidió y estaba en su mano y no pudo afrontar las contrataciones de Gaitán y de Motta).

Al interés del Chelsea que apunta la prensa inglesa se añadirán otros clubes de aquí a final de temporada. Simeone ya tuvo el año pasado opciones de cambiar de aires. El club hizo un esfuerzo muy grande para retenerlo poniéndole un salario competitivo, que se aproxima a lo que le ofrecía el PSG, pero aún es inferior. Simeone tiene contrato hasta el año 2020 y si tiene que salir antes lo hará de mutuo acuerdo con Gil Marín, que si llegaran las vacas flacas y antes de hacerse daño le daría una salida apropiada. Y el Cholo se dejará la puerta abierta del equipo de sus amores, como se dejó la de su Racing de Avellaneda. Pero ahora está enfrascado en su reto del 4-3-3. Y no piensa en irse.