Sanción merecida para Nibali
La etapa de ayer no tenía gran dificultad a priori, pues la subida al Caminito del Rey era llevadera, pero finalmente hubo ciclistas que se dejaron tiempo. La ambición de correr en casa hizo que Movistar y Katusha tiraran para Valverde y Purito en busca de la victoria en la primera llegada en alto. Otros equipos como Sky apenas gastaron fuerzas. El marcaje entre Valverde y Purito provocó que los dos perdieran distancia con Esteban Chaves, el ganador de la etapa, y por eso se quedaron sin opciones de triunfo en la cima. Nairo atacó, pero lo hizo para preparar la llegada de Valverde. Pudimos ver un final extraño, en el que el colombiano demostró que no está en su mejor momento. Si no hubiera cedido podría haber sacado treinta segundos e incluso un minuto a Chris Froome. Tendremos que esperar a una etapa dura como la de Andorra para ver si alguno de los favoritos queda descartado para el triunfo final.
El más perjudicado ayer fue Nibali. Las caídas en la primera semana en Giro, Vuelta y Tour son inevitables y al italiano le tocó la china. Además, el corredor de Astana fue expulsado de la carrera por agarrarse al coche. Me parece una decisión correcta por parte de los jueces, pero se debería echar a todos los que hacen lo mismo. No es la primera vez que un ciclista se cae, pierde varios minutos y se reengancha al pelotón con la ayuda de los vehículos. Por eso, la decisión de sancionar al italiano me ha sorprendido. Nos da pena ver a un corredor en el suelo, pero el reglamento está ahí y hay que cumplirlo.