Los abanicos dan un aviso a Quintana y Nibali
Ayer vimos un gran espectáculo de ciclismo en el Tour de Francia. La etapa tuvo todos los ingredientes para que fuera un espectáculo. En Holanda, el terreno llano hace que siempre se formen abanicos debido al viento y la cercanía al mar. Ayer pudimos ver en acción a los verdaderos especialistas en las clásicas, que estuvieron con las orejas tiesas y se situaron en el grupo delantero de 20 corredores. Era imposible que todos los corredores destacados estuviesen en el primer grupo, y más con cuatro claros favoritos. Froome fue bien arropado por Stannard y Thomas, mientras que Contador estuvo bien resguardado por su equipo con los corredores que se defienden mejor en este terreno. En estas etapas es donde se gana o se pierde con los equipos, porque en la montaña dependes de ti mismo.
Movistar salvó los muebles. Cuando vi a Valverde y Quintana cortados pensé que iban a perder más tiempo, pero al juntarse con el grupo de Nibali, el esfuerzo de sus equipos les libró de la minutada. Pese a dejarse 1:28, pueden estar contentos. No me gustó la actitud de los jueces y la dirección del Tour cuando pinchó Nibali. No se puede recortar 25 segundos yendo a rebufo de un coche, y pasó lo mismo con Sagan. Ayer Nibali pudo perder 3 minutos y Sagan no hubiera disputado la victoria. Debe haber más disciplina, porque estas situaciones son una vergüenza.