Jerez saca partido de las motos
Siempre he pensado que Jerez de la Frontera es una magnífica ciudad, uno de esos sitios en los que a casi todos nos gustaría vivir. Además de eso, su relación con el deporte del motor es tan antigua como conocida, incluyendo un gran premio de motos que se encuentra entre los mejores del Mundial. Pero los actuales gestores del trazado gaditano, en sintonía con el Ayuntamiento, han querido ir un paso más allá y explotar todo el potencial de esa iniciativa que es su elección como Capital Mundial del Motociclismo durante 2015 y 2016. La cantidad y calidad de las actividades que han programado están sirviendo para prestigiar la imagen de Jerez y su zona de influencia más allá de la conquista ya consolidada que supone el paraguas de MotoGP.
Su paseo de las estrellas me parece una idea sensacional y por allí están pasando muchos de los nombres de la historia viva de este deporte. La gala anual de la Federación Internacional de Motociclismo volverá a celebrarse en esta ciudad, que también ha acogido pruebas de primerísimo nivel internacional de diferentes modalidades. Este fin de semana, sin ir más lejos, en Cádiz rugen los motores casi tanto como durante el GP de España. Por una parte, el circuito es el escenario de una competición de motos históricas como es el World GP Legends, con la participación desde Spencer a Ángel Nieto pasando por Gardner, Schwantz, Cardús... Y muy cerca de allí, en Puerto Sherry, se han reunido más de 20.000 Harley-Davidson llegadas desde todo el continente para la celebración de la gran concentración anual de la marca en Europa, que hacía más de diez años que no pasaba por España. Y todo ello, además de ese prestigio intangible de las cosas bien hechas, genera incontables recursos económicos que van más allá de la pasión por el deporte.