El fútbol africano camina fuerte en Nueva Zelanda
El Manchester City sabe peinar el mercado africano. Dos de las perlas de este Mundial Sub-20 ya están allí, listas para el estrellato. Una es el zurdo nigeriano Iheanacho, fino estilista, inteligente. Ya elegido mejor jugador del Mundial Sub-17 en 2013, crece y evoluciona. El otro, el ghanés Yeboah, fantástico como todo el equipo ante Argentina, salvo el apagón en el tramo final.
Hay más africanos que están causando sensación al otro lado del mundo. El nigeriano Yahaya firmó una de las mejores acciones de toda la primera fase con un pase genial de rabona a Isaac Success que terminó con un gol a Brasil. El potente delantero de Senegal Mamadou Thiam mostró un gran manejo del cuerpo y de las dos piernas con el tanto a Colombia. El latigazo al palo de Iheanacho ante Brasil, la habilidad del ghanés Clifford Aboagyie y varios más.
África avanza con fuerza en este Mundial, sus cuatro representantes están en octavos y, sin embargo, siguen con los problemas defensivos que tan caro les han costado en Mundiales de cualquier categoría. Ghana arrolló a Argentina con una mezcla de fútbol combinativo y poderío físico hasta que su portero Lawrence Ati cometió dos errores que casi le cuestan el partido.
Y peor aún fue lo del meta nigeriano Enaholo ante Brasil. Y el central senegalés Sané regaló el penalti que les dio el empate a los colombianos. Por ahí sigue estancado el fútbol africano. Ya garantizaron un equipo en cuartos porque Mali y Ghana lucharán en octavos, pero para ganar el título necesitan esas mejoras atrás. Y no es sencillo de un día para otro.