Benítez, sin equilibrio táctico

Hace diez años exactos, el 25 de mayo de 2005, Rafa Benítez le daba a Ancelotti la peor paliza de su vida quitándole la Champions en Estambul en los penaltis cuando el primer tiempo había terminado con un 3-0 para el Milán. Dos años después, llegó la revancha de Ancelotti en Atenas ganando al Liverpool la última Copa de Europa del Milán. Ahora, una vez, más los destinos de ambos parecen cruzarse... Todo hace pensar que el español será el sustituto del italiano en el banquillo más prestigioso del mundo, o sea, el del Real Madrid. En Italia nadie comprende no sólo por qué Florentino despide a Ancelotti, sino tampoco por qué el hombre que tomará el puesto será el propio Benítez, un entrenador que en Nápoles en dos años ha desperdiciado buena parte de su fama.

Bneítez ha heredado un Nápoles segundo y clasificado para la Champions sin previa gracias al viejo entrenador Mazzarri. Con un equipo más fuerte gracias a Higuaín y Callejón, más otros españoles como Albiol, el Nápoles empeoró su clasificación. El año pasado quedó tercero, siendo eliminado en la previa de la Champions por el Athletic y ahora acabará cuarto salvo un milagro, si el Lazio pierde el derbi con el Roma y el enfrentamiento directo con el Nápoles del próximo domingo. Benítez ha demostrado ser un técnico en búsqueda de una utopía futbolística y sin equilibro táctico porque el Nápoles ha encajado 50 goles en 37 partidos, más del doble que la Juventus (20). La llegada de Benítez es una apuesta con mucho riesgo. Suerte a él y al Real Madrid...