Igual que la Italia de Lippi
La historia se repite para Madrid y Juve. La maldición de la Champions, que nadie ha ganado dos veces seguidas, pudo con Ancelotti, mientras que el conjunto de Allegri se ha ganado el mérito de ir a la final, como le ocurrió en 2003 cuando eliminó al Madrid en la semifinal. Y hay un detalle más: Buffon, uno de los grandes protagonistas de anoche, Pirlo y Barzagli, que entró en los minutos finales, volverán a Berlín, donde lograron el título de campeones del mundo con la Italia de Lippi en 2006.
Será la octava final de la Juventus, como para el Barça. Los italianos están en la búsqueda de su tercera orejona, después de que ganaran la última en 1996 frente al Ajax en los penaltis. Como hizo la Italia de Lippi en 2006, la Juventus ha llegado a una final que nadie esperaba cuando empezó la competición. Y lo hizo con la camiseta del mismo color azul y con una defensa insuperable que sólo encajó un gol de penalti. Cuidado Barça, si la historia se repite, el próximo 6 de junio la Juve dará otra sorpresa.