Adiós a otro pope olímpico: Don Mario Vázquez Raña

Con Mario Vázquez Raña, fallecido el domingo con 82 años, se va otro de los grandes popes del olimpismo. El mexicano que con Juan Antonio Samaranch hizo que se hablara mucho castellano en el COI, al que perteneció entre 1991 y 2012. Incluso intentó que se convirtiera en idioma oficial con francés e inglés. El millonario azteca, dueño de la Organización Editorial Mexicana que posee setenta periódicos, una veintena de radios y más de cuarenta portales de internet en Latinoamérica, pasaba las vacaciones en Avión, un municipio orensano del que procedía su padre Venancio, que puso la primera piedra de un incipiente imperio iniciado con unos almacenes.

Al aeropuerto de Peinador llegaba el avión privado de Vázquez Raña, que tantas veces puso al servicio del COI y donde tantas partidas de dominó se jugaron. Viajaba siempre con un fotógrafo personal, que dejó constancia de sus contactos con mandatarios de todo el mundo. Practicante de tiro olímpico, su influencia fue enorme mientras presidió ACNO (Asociación de Comités Olímpicos Nacionales), entre 1979 y 2012. Una guerra interna acabó con Ahmed Al-Sabah reemplazándole. El jeque kuwaití de infausto recuerdo para Madrid 2020, al que otro gallo le podría haber cantado con Vázquez Raña al frente. Fue valedor de Río 2016, pero no veía con buenos ojos Tokio 2020.

En Copenhague, en 2009, cuando Madrid 2016 se la jugaba, cuentan que el entonces presidente Rodríguez Zapatero iba recibiendo a los miembros del COI en una suite. “¿Que quiere Zapatero verme? ¡Pues que venga él a mi habitación!”, relatan que dijo el pope que controlaba un buen puñado de votos. Don Mario.