Yamaha se lo ha tomado en serio

Lo avanzaron hace sólo unos días en la presentación de su nuevo proyecto para el Mundial de MotoGP. Yamaha quiere evitar a toda costa que se repita una situación como la del pasado año. No se trata de que sus rivales de Honda ganen el campeonato, eso siempre puede ocurrir, nadie tiene garantías de éxito; lo grave en 2014 fue que la sensación que quedó entonces apuntaba a paliza, la autoridad que exhibió Márquez resultó abrumadora. Sobre todo en los dos primeros tercios del certamen parecía que el catalán de HRC competía en otra categoría y todos sus rivales debían resignarse a semejante hegemonía. Un duro trago para una escudería y una marca como Yamaha, que logró reaccionar en la parte final del campeonato pero ya sin posibilidad de recuperar el terreno perdido.

En esa puesta de largo del equipo oficial en Madrid, sus responsables y pilotos dejaron muy claro que querían aprovechar la inercia de los últimos grandes premios de la pasada campaña para darle la vuelta a la tortilla. El responsable de competición de Yamaha explicó que habían avanzado significativamente con la M1 y sus pilotos refrendaron que así era. En los primeros test de Sepang estamos viendo que no iban de farol. Lorenzo y Rossi ruedan realmente rápido, pero además su marca les está permitiendo probar soluciones novedosas para intentar dejar a cero el déficit con Honda. No será fácil, desde luego, el rival es de los que asustan, pero parece indiscutible una reacción solvente de la marca de los diapasones que debería aportar mucho más interés a MotoGP desde la primera carrera de Qatar.