P. P. San Martín

Cristiano desdibujado: sólo cuatro remates

n Con James e Isco en el once inicial se anunciaban buenas conexiones en ataque ante un San Lorenzo que saltó como se preveía, muy junto y atrás. Y la mala noticia fue que al Madrid se le estranguló la fluidez. Pagó la factura, sobre todo, Cristiano Ronaldo, desasistido, incluso sin sitio estable, obligado a cambiar de bandas y más gris de lo normal. Los argentinos conseguían el propósito de rebajar el gas del portugués y con ello el peligro del Madrid, que quedó en pies de Benzema (muy fallón) y Bale, más combativo.

Y la final no fue el partido más feliz de Cristiano. En la segunda parte tampoco apareció ‘el animal’ esperado, sobre el que todo el mundo tenía puestos los ojos. San Lorenzo le acorraló, le tiró al suelo cuando fue necesario y escasamente tuvo una ocasión de gol de cabeza en el último suspiro. Remató cuatro veces y de ellas sólo dos a puerta. Estos datos no parecen de Cristiano y hablan de su día incómodo.

Atasco inicial. Arranque sin ideas del Madrid. La zaga argentina bloqueó líneas de pase. Las bandas no progresaban. La BBC pagó con poco remate.

Cuatro regates. El tapón de San Lorenzo pedía uno contra uno, pero no fue el día de Cristiano: 4 regates completados y sólo 27 pases buenos.