El proyecto de Alonso con McLaren tampoco es sencillo
Hay que considerar esperanzador el nuevo proyecto de Fernando Alonso con McLaren. Después de la travesía en el desierto que ha supuesto un lustro en Ferrari, no apetece ni siquiera pensar que las cosas puedan ir peor en Woking. De hecho, no debería ser así. Recordemos que hablamos de otro de los grandes de la Fórmula 1 y que en su anterior colaboración, el asturiano estuvo a punto de ganar el título al primer intento. Lástima que se enredaran tanto las cosas… Sin embargo, eso no quiere decir, ni mucho menos, que el desafío sea sencillo, quizá todo lo contrario. Honda regresa a los grandes premios buscando reverdecer laureles como proveedor de motores aunque lo hace en una de las épocas más complejas técnicamente en la historia de este deporte.
El acierto de Mercedes en esta F-1 de las unidades de potencia híbridas nos ha deslumbrado, sólo que no conviene olvidar los enormes problemas que han sufrido tanto Renault como Ferrari. Los franceses consiguieron solventarlos en buena parte con el transcurso de los grandes premios (y apoyados en el enorme potencial de Red Bull, porque otros como Lotus no fueron capaces), mientras que del desastre de los italianos poco se puede decir ya… Es así como resulta un escenario previsible que los japoneses se enfrenten a tropiezos similares y que 2015 pueda ser un año con más sombras que luces, al menos en su primera parte. Resulta más inteligente ser realista y curarse en salud que elevar las expectativas por encima de lo razonable y que luego lleguen las decepciones. Alonso lo sabe y ha asumido el riesgo, lo importante será que todo el equipo trabaje en la misma dirección para intentar que esa transición sea lo más breve y eficaz posible.