Vuelve el mejor Touré y el United gana sin convencer

Bayern. Siete goles en liga de Götze con el derechazo inapelable de ayer, seis de Lewandowski y cinco de Müller y Robben. En un equipo con tal potencial ofensivo no hay un goleador claro, por encima de los demás. Excelente noticia.

Wilshere. Falló un gol solo ante De Gea y desde ese momento se vino abajo. Empezó a fallar pases cómodos, a protestar, a irse del partido hasta que terminó por hacer una terrible entrada. Para entonces ya no era el Wilshere que necesita este Arsenal.

Man. United. Difícil conseguir más con menos. Ganaba 0-1 sin haber disparado a puerta, cazó una contra para el 0-2 e hizo poco más que meterse atrás y tener a De Gea como salvador. Ganó en el Emirates, pero dejó claros sus problemas. Van Gaal cada vez confía menos en Ander. Yaya Touré. Poco a poco regresa a su nivel, cada vez con más peso en el juego del City. Y marcó ante el Swansea el gol que culminó una remontada necesaria. Acudir en el momento justo a la zona exacta, especialidad del marfileño.

Aubameyang. Se marchó Lewandoski, llegaron Adrián Ramos e Immobile, pero al final el mejor nueve estaba en casa y se llama Aubameyang. Gran partido el suyo frente al Paderborn, pasa por un momento de forma excelente. Velocidad pura, cada vez hace más cosas mejor. Pogba. Exhibición la suya en Roma ante el Lazio, una más y van muchísimas. Dos goles con una definición magnífica y una superioridad física tremenda. A veces da la sensación de que Pogba juega ante juveniles, y el que tiene 21 años es él.

Rodgers. Sigue sin dar con la tecla y son demasiados partidos ya. Puso mucho futbolista para tocar por el medio como Lallana, Coutinho o Sterling, adelantó bastante los laterales Johnson y Manquillo pero volvió a defender mal. Guardado. Empezó como volante izquierdo en aquel Atlas justo antes del Mundial 2006, creció como jugador, se consolidó en Mexico, llegó al Depor, en el Valencia jugó mucho como lateral pero fue en el Leverkusen donde empezó en el mediocentro y así sigue en el PSV. Líder en Holanda, pieza clave.

Colombia. Preciosos los cuadrangulares finales colombianos, con un Atlético Nacional de Osorio siempre favorito pero la Copa Sudamericana a cuestas y un Independiente de Medellín a gran nivel. Con Marrugo en forma y el goleador argentino Ezequiel Cano como grandes estrellas.

Menez. Marcó un gol de otro partido, más bien de un Milán-Inter de otra época. Un golazo en una de las pocas jugadas colectivas que hizo el Milán en un derbi con muy poca cosa. Debutó Mancini pero no se atrevió a presionar al Milán, lo que más daño le hace. Icardi desconectado y el irregular Hernanes entró demasiado tarde.