¡Hola amig@s! Estoy ahora mismo escribiendo desde Japón, esperando el vuelo para viajar a Australia, que es donde será la próxima carrera, haciendo escala en Hong Kong, así que me espera un largo viaje por delante... si no llega antes el tifón que están esperando. Aún un poco afectado con el jetlag, espero habituarme pronto, porque en Phillip Island aún será peor ya que tenemos más horas de diferencia, de hecho, cuando me esté levantando ¡por España os estaréis acostando!

Público japonés. Es alucinante ver a todos los fans cuando venimos a correr a Motegi. Hay gran afición por la moto. Están un poco locos con las vestimentas que se preparan para animar a su piloto favorito. Hay de todo: camisetas, gorros, kimonos, pañuelos, banderas, pinturas en la piel, cortes de pelo con el número de su piloto, mascotas uniformadas de algún equipo… Me hacen mucha gracia. Te llevan regalos, que mayormente es comida tipo galletas, frutos secos, incluso pescado disecado… ¡eso último yo ni lo pruebo! ¡Ja, ja, ja! Será típico regalar comida allí, o lo mismo nos ven a los pilotos delgaditos y se creerán que pasamos hambre… ¡je, je, je! Te animan muchísimo y pueden esperar horas y horas a que termines de trabajar con tu equipo para que salgas del box y conseguir un autógrafo o una foto contigo. Siempre te respetan y si en ese momento, no puedes pararte porque tengas prisa, te esperan hasta que puedes atenderles, es increíble la paciencia que tienen.

Campeón MotoGP. ¡Ahora sí tenemos campeón en MotoGP! Aunque ya prácticamente se daba por hecho, hasta que no se consigue matemáticamente no puedes cantar victoria. A falta de tres carreras, Márquez es de nuevo campeón de la categoría con un año sprint ganando las diez primeras carreras y dejando ya casi sentenciado el campeonato. Eso le permitió poder fallar en Misano y arriesgar en Aragón con una estrategia que en condiciones normales no creo que hubiera intentado hacer. Es un grandísimo piloto, con mucho talento, mucha adaptación a las circunstancias, mucho hambre de victoria, muy valiente, que tiene pocos, pero muy pocos puntos débiles y que es difícil de batir. Me alegro mucho por él, porque a parte de ser mi rival dentro de la pista, tenemos buena amistad fuera de ella desde hace unos cuantos años. Es un gran chico. Algunos pilotos cambian la manera de ser que se ve en la televisión a la que en realidad es. Marc es tal como se ve. Alegre, simpático, humilde, positivo. Con esas maneras de pilotar y de ser como persona, creo que hará historia en el motociclismo… quiero decir más de la que está haciendo…

Mal resultado. Sobre mi fin de semana, casi mejor ni recordarlo. La tónica de las últimas carreras. No somos capaces de hacer trabajar el neumático trasero y así es imposible ir rápido. Es frustrante pilotar así porque mi sensación es de ir jugándomela en cada curva, porque siento la rueda trasera al límite, y me falta un segundo por vuelta que es imposible bajar así. Me pasé el 75 por ciento de la carrera detrás de Hernández sin poder pasarle. Esta pista es de frenadas y me costaba mucho parar la moto, así que cada vez que intenté pasarle frenando, me colaba y me devolvía la pasada. Al final pude superarle y acabar décimo. Un resultado que por supuesto no me satisface nada. Pero hay que seguir trabajando para dar con una solución, si no, creo que serán tres últimas carreras del campeonato con los mismos resultados.

Moto2 y Moto3. En Moto3 vivimos una gran pelea por ganar. Al final Álex Márquez cruzó la línea de meta primero y aumentó la distancia en el campeonato respecto a Miller y Rins, que acabó décimo tras una salida de pista en el inicio por otro piloto, aunque aún tiene posibilidades de luchar por el título. Completaron el podio Vázquez y Binder. Victoria para Luthi en Moto2 y gran segundo puesto de Viñales. Rabat fue tercero y aumentó su renta en la clasificación y ya está casi acariciando el título.

Nos vemos en Australia. Lo dicho, si todo va bien, estaré ahora por Australia. Qué recuerdos del 2006 en esta pista cuando gané el título de 125cc… Ahora es otra situación y no es tan bonita como aquel año, pero igualmente voy a trabajar dando mi máximo para recuperar esas buenas sensaciones y estar más arriba. ¡Un fuerte abrazo desde las antípodas!