Un United sin cantera tira de cartera y el Chelsea más ofensivo de Mou
Cambios. Si algún día vienen con tiempo a Inglaterra, cojan un tren y paseen por Bletchley, un pueblo sin importancia estratégica, un sitio cualquiera que se convirtió en crucial en la Segunda Guerra Mundial porque fue allí donde se construyó la máquina que decodificaba las comunicaciones alemanas. Ahí sigue aquel ejemplar de ordenador prehistórico. Con el espíritu de aquel aparato, adentrémonos en dos mensajes que se han repetido por estos lares hasta la saciedad en los últimos días. Que el Manchester United ha perdido su alma porque se ha puesto a gastar millonadas y no saca jugadores de la cantera. Y que el Chelsea es por fin un equipo ofensivo gracias al cambio de estrategia de José Mourinho.
Orden de Abramovich. Sobre lo segundo: el principal responsable de que el conjunto londinense ataque con la fluidez y efectividad de esta temporada es Roman Abramovich. El millonario ruso le pidió a Mourinho hace dos veranos que, si iba a regresar, debía convertir al Chelsea en un equipo entretenido. El sábado Roman saltaba de su asiento viendo cómo Diego Costa marcaba su hat-trick (siete tantos tras diez disparos entre los tres palos), cómo Cesc completaba su sexto partido consecutivo en la Premier dando pases de gol (dos con el Arsenal) y cómo el once sobre el campo no tenía suficiente con un gol o dos. Lleva quince tantos, pero ha encajado seis (sólo cuatro equipos tienen peor defensa). Mourinho debe equilibrar a los suyos para que no se le tuerza demasiado cuando le toque jugar con rivales de más empaque, pero, mientras tanto, Roman Abramovich disfruta con su nuevo juguete.
Buenas asociaciones. Por cierto, teniendo en cuenta que a Del Bosque le gustan las asociaciones sobre el campo, estaría bien que se pasara por Stamford Bridge para ver lo bien que encajan Costa y Cesc. Añadan a Iniesta, Silva y Koke en el once, y la nueva España volverá a tener control y gol.
Un gasto de 165 millones. Lo primero: a Gary Neville, Paul Scholes y otros exfutbolistas del Manchester United no les ha gustado nada que el club se gastara 165 millones de euros este verano. Y tiene la misma cifra para continuar fichando. Dicen que el Manchester ha perdido el alma. Se les olvida que siempre se han gastado un pastón: desde 1983 han batido el récord de traspaso más caro en seis de las diez ocasiones en que se ha producido. Ferguson contaba con suplentes de 25 millones de euros. ¿Y la cantera? Del once del domingo, solo Evans y Blackett proceden de las categorías inferiores. Pero por una sola razón: no se está haciendo bien el trabajo. ¿Wellbeck o Falcao? Van Gaal, hoy por hoy, lo tiene claro.