Coach K, el padre de la redención
Antes de los Juegos de Londres, el Team USA visitó el cementerio de Arlington. Allí, los mejores jugadores del mundo se quedaron absortos ante las tumbas de soldados caídos en Irak y Afganistán: casi todos más jóvenes que ellos. Kevin Durant dijo que “jamás olvidaría” aquel día. Justo lo que buscaba Mike Krzyzewski, padre de la nueva era dorada de la selección estadounidense. Formado en West Point, Coach K moldea una reeducación necesaria después de que EE UU tocara fondo en Atenas 2004 (tres derrotas y bronce). De la improvisación al programa. A la hora de elegir al arquitecto de la redención (Redeem Team), se reunió en secreto a leyendas como Michael Jordan, Larry Bird y Jerry West. De ahí emergió un nombre: Krzyzewski.
De él dijo LeBron que representa “todo por lo que estamos orgullosos de ser estadounidenses”. Miembro del Hall of Fame, dirige desde 1980 a Duke. Acostumbrado a rechazar ofertas millonarias de la NBA, sí aceptó el reto de inculcar a sus estrellas que sólo volverían a ser invencibles si entendían que habían dejado de serlo. Los resultados, dos oros olímpicos y la segunda final de Mundial seguida: la redención.