Tiene que mejorar sin el balón
Zurdo, su capacidad para explotar los espacios en carrera y su disparo marcaron su carrera hasta llegar al Atlético, pero no fue sencillo. Ha ido mudando su posición en los últimos años en el Torino, primero pegado a la banda derecha y después segundo punta. Y una explosión bastante tardía, aunque ya en su etapa en el Pisa hace seis años los hinchas le llamaban Cercinho por su habilidad. De aquella época es su devoción por Henry, y en su velocidad hay algún parecido. Nunca pudo triunfar en el Roma. Minutos contados en el primer equipo, debut con Capello con 17 años en un empate a cero ante el Genoa pero pocas opciones. Cosmi en el Brescia le olvidó por un tanque como Possanzini, fue Ventura en el Pisa quién le hizo explotar y con él también ha triunfado en el Torino.
Ventura le puso en la derecha, le cambió de posición y confió siempre en él. Pero no consiguió que trabajase mucho sin balón y eso es ahora responsabilidad de Simeone. Si lo logra, hay jugador para muchas tardes de éxito, capaz de ser uno de los grandes asistentes de la Serie A y terminar con trece goles la temporada pasada. En la Fiorentina asomó tras dejar definitivamente el Roma, en el Torino se ganó la selección aunque no ha terminado de encontrar hueco. Buen amistoso ante España en el Calderón, su nueva casa. Y de momento olvidado por Conte. En este Atlético, que aún no definió el dibujo, parece más destinado a la banda derecha, aunque esa es la mejor posición para un Griezmann que no funcionó más centrado ante el Eibar. Segundo punta en un 4-4-2 es la otra opción.