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Velasco Carballo sacó con nota sus dos partidos

Últimamente, en los Mundiales, nuestros colegiados no pasaron el corte de la fase de grupos, teniendo que volver para casa antes de lo previsto. Sin embargo, el árbitro madrileño Carlos Velasco Carballo tuvo dos partidos en la primera fase de Brasil 2014. Uno, el Uruguay-Inglaterra, un encuentro donde demostró una perfecta dirección del juego y control de los jugadores, y eso que el partido estaba catalogado de alto riesgo dado la importancia del mismo. Al final del choque, ambos seleccionadores dijeron que el árbitro había estado muy correcto. A todo esto hay que añadir la buena colaboración que tuvo en las bandas de los árbitros asistentes Alonso Fernández y Juan Yuste.

Después, Velasco Carballo dirigió el Bosnia-Irán. Ahí también tuvo la suerte que siempre hace falta para sacar el partido con nota y además ser felicitado por la dirección de arbitraje de la FIFA. Al no ser designado para octavos de final era seguro que le darían un partido de cuartos. Sobre el papel, el Brasil-Colombia es un partido de alto riego y muy importante para posibles metas mayores, quizá la final de jugarse entre dos equipos sudamericanos.

De menos a mas

El nivel de arbitraje comenzó siendo malo, sobre todo en el partido inaugural con el japonés Nishimura, que perjudicó a Croacia en beneficio de Brasil, señalando un penalti de Lovren a Fred que no lo fue, y anuló un gol a Croacia injustamente. También estuvieron desacertados en la primera fase Pitana (Argentina) en el Rusia-Corea del Sur con muchos errores de apreciación; Webb (Inglaterra) en el Colombia-Costa de Marfil no vio unas manos de James dentro del área; Mazic (Serbia) en el Argentina-Irán no señaló un claro penalti de Zabaleta a Defagah; Osses (Chile) en el Italia-Costa Rica no señaló un claro penalti de Chiellini a Campbell; Oleari (Nueva Zelanda) en el Nigeria-Bosnia anuló un gol a Dzeko por fuera de juego inexistente; Rizzoli (Italia) en el España-Holanda señaló un penalti por derribo a Diego Costa, que no existió, y un gol a Holanda en fuera de juego; Roldán (Colombia) en el México-Camerún anuló dos goles a México por fuera de juego que no eran. Los arbitrajes, en general, han ido mejorando según ha ido transcurriendo el Mundial como los de Vera (Ecuador), Geiger (EE UU), Brych (Alemania), Halmoodi (Argelia) y algunos más, como Velasco Carballo. Una vez en la final, varios nombres están en la órbita de FIFA desde antes del Mundial. Lo normal es que designen a un árbitro de diferente continente al de las dos selecciones enfrentadas. Si son entre sudamericanas entrarían Velasco, Eriksson, Proença y Cakir con más posibilidades. Si son entre europeas, tienen posibilidades Ricci (Brasil), Vera (Ecuador) y M. Rodríguez (México). Si son entre una europea y una sudamericana, posiblemente esté entre Williams (Australia), Haimoudi (Argelia), Irmatov (Uzbekistán) y Geiger (EE UU). En el aspecto disciplinario, los árbitros tienen que ver muy claras las entradas para amonestar y muchas de ellas han sido más de roja que de amarilla. Esto indica que en este Mundial se está aguantando lo máximo la tarjeta roja, lo que ha provocado lesiones importantes. En las barreras ha sido un acierto el uso del espray, ya que en ningún momento los jugadores han traspasado la marca (en España son reacios a usarlo, pero deben ver que existen más ventajas). Para terminar, hemos visto a los cuartos árbitros en varios partidos con poca autoridad y avasallados por los cuerpos técnicos.