Felix Brych tiene todo bajo control y es una garantía

Este alemán que fue árbitro FIFA con 30 años (edad para aprender a madurar en Europa y que ahora también se hace en España con jóvenes como Gil Manzano y Hernández Hernández) ha conseguido en siete años arbitrar 56 partidos con la escarapela de internacional. El último fue el Barça-Atlético de cuartos de final de la Champions, donde tuvo una actuación neutral y correcta. Aguantó mientras pudo las tarjetas y luego se dedicó a sacar el partido sin protagonismo.

Es interesante que el Sevilla vea el vídeo de este partido. Se dará cuenta de que a Felix Brych le gusta dejar jugar cuando la disputa del balón se hace virilmente sin ánimo de hacer falta o de engañar. Es riguroso con las tarjetas y algunas veces le he visto aceptar el diálogo, aunque es de pocas palabras.

Será de los árbitros más jovenes en pitar una final que, por regla general, se les suele dar a los que han cumplido ya los 40 años. Lo que más le distingue en el campo es su buena dirección, su admirable colocación y que advierte a los jugadores cuando pasan a su lado como diciéndoles: que te he visto para que vean que tiene todo bajo control.

Este colegiado se hizo famoso en Alemania por un gol que dio esta temporada al Leverkusen en un balón que entró por el lateral de la portería. Además está considerado por la Prensa alemana como un colegiado mejor para los equipos visitantes. En este sentido Sevilla y Benfica pueden estar tranquilos: los dos son visitantes. Creo que el partido será fuerte en defensa y ahí Felix Brych se desenvuelve bien, sobre todo si tiene que tomar decisiones importante. Hoy en día UEFA afina mucho con los árbitros a la hora de darles una final y de salida Brych ya es una garantía.