El Madrid no perdona los calificativos de los Comités
A la guerra. El Comité de Competición y el de Apelación pueden y deben juzgar con absoluta independencia los hechos acontecidos en un terreno de juego. Pero lo que nunca deben hacer es calificar la defensa jurídica de un club asociado. Crecidos por el ruido mediático de la sanción a Cristiano, han decidido ser protagonistas en los medios y la mejor manera es tirando de las orejas a los abogados del Real Madrid que han presentado los distintos recursos. Ya sonó a barbaridad que Competición calificara como duras las alegaciones del club blanco, en referencia a un párrafo del recurso que hablaba de actitud torticera, pero mucho peor es que Apelación dijera ayer que entiende como capciosos algunos de los argumentos empleados en la defensa del jugador. Demuestran que están encantados con esta guerra.
Habrá réplica. Dichos Comités tendrán la respuesta adecuada pero, para su desgracia, no será de forma pública. Entiende el Real Madrid que ha llegado el momento de tratar este asunto de forma interna con la Federación. Ya no está en juego que le quiten o le dejen de quitar partidos de sanción a Cristiano. Está en juego que no salga gratis incumplir obligaciones, tanto en el caso del árbitro cuando redactó el acta de forma chapucera, como en el de los dos comités que además de juzgar se han permitido calificar de forma despectiva los recursos enviados por el club.
Pendientes de la nevera. Del mismo modo el Madrid estará alerta para ver si se cumple la noticia difundida por todos los medios el jueves sobre una posible sanción interna al colegiado Ayza Gámez. Si resulta cierto que visitará la nevera por su desastroso arbitraje de San Mamés, les estarán dando de alguna forma la razón en las reclamaciones planteadas. ¿Castiga Sánchez Arminio al colegiado sabiendo que lo que juzgó en el campo fue la pelea con Gurpegui y no la de Iturraspe? ¿Lo aparta porque en la redacción del acta no fue más preciso con el gesto despectivo de Cristiano? ¿O lo hace porque simplemente fue una calamidad durante los noventa minutos?
La FEF, preocupada. Y en medio de esta batalla, una Federación que, en su cúpula, creía superados los conflictos con el Real Madrid. Me consta que algún ilustre no está muy satisfecho sobre cómo se ha gestionado este asunto y sabe que todo lo que se había ganado en los dos últimos años normalizando las relaciones con Florentino Pérez, se ha tirado por la borda en apenas una semana.