Otra provocación: el derbi de mañana lo pita el tal Clos...

Sánchez Arminio no se corta un pelo. Al revés. Si ve soliviantada a la masa social madridista por el enésimo arbitraje que ha perjudicado a su equipo, el director del Comité Nacional de Árbitros da una vuelta de tuerca y parece decirles: “Si no queríais té, tomad dos tazas”. Viene esto a colación porque su última ocurrencia ha sido designar para el derbi copero de mañana en el Bernabéu a Clos Gómez. Sí, otra vez él. LA PESADILLA.

Este aragonés de 41 años lleva años convirtiendo sus partidos a los blancos en un sinsentido y en un cúmulo de disparates unidireccionales que siempre acaban con berrinche en el vestuario madridista. Su última hazaña está muy cercana. Pamplona, 14 de diciembre. Clos pasó por alto un penalti meridiano de Arribas sobre Modric, con 1-0 en el marcador para los navarros. Clos miró para otro lado. Además, se inventó una falta de Ramos a Cejudo, a la que añadió una tarjeta para amedrentarle. Antes del descanso le echó tras un choque con Torres. Competición aceptó el recurso del Madrid y le quitó al andaluz la primera amarilla. Pero su equipo se dejó dos puntos en El Sadar y el daño ya estaba hecho. Y Clos tan feliz.

En la pasada final de Copa entre Madrid y Atleti (mayo de 2013) expulsó con roja directa a Mourinho y a Cristiano...

Pero lo peor fue hace seis años en un derbi liguero en el Calderón. ¡Anuló tres goles legales al Madrid! Dos de Raúl y uno de Van Nistelrooy. Además, expulsó al ariete holandés en el primer tiempo...

Hay árbitros a los que se les ven las intenciones. Son humanos, tienen equipo desde niños, amistades comunes, pasiones futbolísticas previas a la carrera arbitral... Se dejan llevar. Se vio con Ayza en Bilbao. Si fue tan certero, él y su linier con vista de halcón, para comprobar que el amago de tirón de pelo de Cristiano a Gurpegui era “un golpe en la cara”, significa que van dejando huellas de sus debilidades. Que Gurpegui provocase primero al portugués, con un empujón con las dos manos abiertas en el pecho, y que fingiese una agresión inexistente después, para Ayza no es algo que mereciese siquiera una amarilla de reprobación. O que Iturraspe se tomase la justicia por su mano tirando un cabezazo a Cristiano. Eso es sólo tarjeta amarilla, claro.

Voy a crear el MCIA: Movimiento Contra la Intolerancia Arbitral. Pánico me da la que puede liar mañana el tal Clos en el Bernabéu. Más madera. En la vuelta del Calderón, Arminio ha elegido a Undiano, el que nos birló el penalti clamoroso de Mascherano a Cristiano en el Clásico liguero del Camp Nou. Esperemos que esta vez dejen en casa sus verdaderos sentimientos...