Mateu: demasiado permisivo

Mateu Lahoz hizo un arbitraje en su línea, de permitir en exceso el contacto entre jugadores, sobre todo en el primer tiempo del encuentro. Y eso que el partido se puso caliente muy rápidamente. Al principio no pareció que iba a ser de esta manera. A los tres minutos, sacó una tarjeta muy protestada a Laporte por una entrada en el lateral derecho a Diego Costa, que parecía que no le había tocado, aunque en realidad sí hubo contacto. El partido se fue calentando y es inusual en Mateu Lahoz sacar algunas tarjetas por protestar, aunque siguió dejando que existiesen varias faltas marrulleras por parte de Diego Costa, como ocurrió en el minuto 14 cuando se tiró sobre Muniain en el lateral de una de las bandas, cerca de los banquillos.

En el minuto 27, se reclamó penalti sobre Susaeta dentro del área, pero fue él quien falló al intentar rematar e Insua ni siquiera le tocó. En el 41, se produjo un salto de Miranda sobre Aduriz, al que le metió el codo en la nuca y el jugador del Atlético de Madrid no fue amonestado por la acción. En el 44, se debió tomar medidas disciplinarias contra Diego Costa cuando hizo una falta clara y, después, con el juego parado dio una patada a Balenziaga.

En el minuto 54, no debió subir al marcador el primer tanto del Atlético, ya que existió falta de Miranda por empujón a San José al principio de la jugada cuando se desmarcó de él. En resumén, el colegiado se dedicó a sacar el partido adelante de la mejor forma posible y, aunque tuvo errores técnicos, los repartió entre uno y otro equipo.

El gol de Diego Costa fue totalmente legal, ya que San José se adelantó tarde y le dejó al jugador del Atlético en posición totalmente correcta para irse de cara a la portería de Herrerín. Cabe destacar la excelente labor de los asistentes, que no tuvieron un solo error en todo el partido y tampoco fallaron en los fueras de juego.