Peugeot, la próxima parada para Carlos Sainz

Se acabó el Dakar para Carlos Sainz. No llegará a la meta de Valparaiso y reconozco que me ha sorprendido que su buggy haya aguantado hasta el accidente que le ha costado el abandono. El año pasado el mismo coche terminó en una meritoria séptima posición, pero es evidente que la exigencia a la que el madrileño somete a sus vehículos es muy superior a la de otros pilotos. Además, la sanción por saltarse un punto de control y los problemas del pasado martes le penalizaron tanto que sólo le quedaba la opción de ir al ataque, de intentar ganar el mayor número de etapas arriesgando quizá más que los demás, que aquéllos que aún aspiran a la victoria final. Así que carrera terminada y espero que también suponga un cambio de ciclo para él.

Sainz ha vuelto a demostrar, aunque no fuera necesario, que tiene velocidad sobrada para seguir aspirando a todo y además ahora aderezada con la experiencia de siete ediciones del Dakar. Así que sólo necesita un coche que le siga el ritmo, algo que sólo le podrá dar una marca oficial, no los inventos en los que se ha visto obligado a embarcarse los dos últimos años. Y esa aspiración tiene nombre propio: Peugeot. Es obvio que el piloto y la marca por el momento se mantienen al margen de estas informaciones, pero de hecho la confirmación del proyecto francés para 2015 no tardará en llegar. A partir de ahí, sólo quedará que el español solucione algunos flecos para afrontar un reto que le entusiasma. Y cuando Sainz tenga un coche que esté a su nivel, las cosas serán bien diferentes. Entonces en Mini sí que deberán empezar a preocuparse por su monopolio…