No ha sido nuestro mejor día
Las ganas de llevarnos este partido ha sido clave para conseguir la victoria, porque no se puede decir que haya sido el mejor día de la Selección, pero si tienes que tener una tarde tan gris, mejor ahora que cuando no tenga arreglo. Además, creo sinceramente que esta llamada de atención que nos ha dado Noruega nos vendrá bien para mentalizar a todo el plandel de que en un Campeonato de Europa no hay enemigo fácil, y que nadie se entrega antes de tiempo. Cierto es que ellos han vivido sobre todo de una actuación extraordinaria de su portero Ole Erevik, que ha firmado un partido descomunal.
Sinceramente, lo he pasado mal en casa viendo el partido por la televisión, y claro que echas de menos no estar ahí, apoyando y jugando en un pabellón con tanto ambiente y en un partido importante. Tras una aceptable primera mitad nos hemos metido en problemas por culpa de algunos balones perdidos que nos han lastrado bastante. Pero cuando había que apretar los dientes y sacar el orgullo y la casta de unos campeones del Mundo, la defensa final nos ha permitido recuperar el mando del marcador que se nos había ido mediada la segunda parte. En esos minutos cruciales hemos tenido algunos nombres propios a destacar, como Víctor Tomás, como Joan Cañellas o como Jorge Maqueda, porque Sierra ha estado inmenso durante todo el encuentro salvo en esos minutos de descanso que le ha dado Manolo Cadenas en la segunda mitad del encuentro.