La ACB se agarra a Soler

El nombre de Albert Soler ha vuelto a salir como candidato para presidir la ACB. Los clubes, conscientes de la posibilidad real de ser intervenidos por el Consejo Superior de Deportes (CSD), tratan de ponerse de acuerdo y aceptar a Soler como candidato único para evitar la desaparición de la ACB. Para ello tienen que asegurarle un mínimo de catorce votos, pues de lo contrario quedaría de nuevo en evidencia la ingobernabilidad del baloncesto profesional, lo que precipitaría la actuación del CSD y el nombramiento de un presidente. Ante esta circunstancia, Querejeta tiene especial interés en desbloquear la situación, y como miembro de la comisión encargada del proceso busca los tres votos que le faltaron a Soler para presidir la ACB.

Presuntamente ya tendría dos, y el que falta debería salir del Gran Canaria, Murcia, Valladolid, Obradoiro y Madrid. En algunos casos, la reconocida afinidad de Soler hacia el Barcelona no es el mayor impedimento para votarle, sino su afiliación al PSOE, sobre todo por parte de los equipos que tienen un claro influjo del PP, por lo cual la supervivencia de la ACB ha pasado a la esfera política. En todo caso, la ACB se vuelve a poner al borde del abismo, porque si esta operación no saliera adelante, el revés dejaría al baloncesto profesional sin capacidad ni credibilidad para salir del atasco. Por tanto, si en los próximos días se confirma la candidatura de Soler, den por hecho que será el nuevo presidente ejecutivo con plenos poderes.