Del Bosque sí cuenta con ellos

Pese al ostracismo que viven en su club, Isco e Illarramendi conocen de primera mano que serán la base del relevo generacional en la Selección. Y no son palabras huecas. El seleccionador lo está demostrando con hechos. Cada vez que se lesiona un veterano, tira de gente que ha sido campeona de Europa con la Sub-21. Si acaso a Isco, que ya ha pasado esa primera etapa, le debe angustiar que su último mes en la grada le haya apartado de estos dos amistosos en África. El de Arroyo de la Miel ya se sentía uno más de la absoluta tras su fantástico final de temporada con el Málaga. Toca tener paciencia. Ancelotti se ha asustado con tanta crítica y ha tirado por el camino más sencillo: que le saquen las castañas del fuego los que llevan toda la vida en el Real Madrid.

Pero en los despachos también saben que Illarramendi e Isco son el futuro. Estas dos semanas en Valdebebas, sin compromisos internacionales, les dará una ventaja para cuando regrese la competición. No descarto que Del Bosque acabe tirando del malagueño para próximos compromisos de la Sub-21. Parece que el Mundial de Brasil, jugando poco en el Madrid, empieza a ser una quimera. La clave está en saber esperar y aprovechar al máximo los minutos que tengan. En eso parte con cierta ventaja Illarramendi porque es el relevo natural de Xabi Alonso, que necesitará descansos. Más complicado es para Isco porque, ¿de quién es sustituto? No entra en las rotaciones cuando Ancelotti cambia la delantera y tampoco cuando refresca el centro del campo.