Un saco de medallas
Mireia Belmonte y Melani Costa han regresado de la Copa del Mundo con un saco de medallas: dieciocho. Diez de Mireia y ocho de Melani. Esta competición consta de ocho pruebas, agrupadas en tres ciclos. El primero se celebró en Eindhoven y Berlín nada más acabar los Mundiales, y el segundo es el que se ha disputado días atrás en Moscú, Dubai y Doha, con el balance ya señalado de las nadadoras españolas. Del 5 al 14 de noviembre se celebrará el tercer ciclo en Singapur, Tokio y Pekín. Se trata de un circuito muy exigente, y que sólo compensa si se está entre los mejores nadadores, porque los 812.000 dólares que hay para premios sólo se reparten entre los seis primeros clasificados de cada prueba y de cada competición.
El hecho de que Mireia y Melani estén compitiendo en la Copa del Mundo dice mucho en su favor. Se están, de alguna manera, profesionalizando, que es lo que le falta a nuestros nadadores para dar un salto de calidad. La competición se convierte en el mejor entrenamiento. Hay que rendir siempre a muy alto nivel para sacar algo en limpio. Largos viajes y pocas atenciones, sin nadie que te arrope. Cobras por lo que vales. La Copa del Mundo curte. Resulta más cómodo competir en el campeonato de turno, ganar una medalla, cobrar la beca y ponerse a entrenar a la espera del siguiente campeonato. Pero eso se acabó. Mireia y Melani quieren convertirse en campeonas y tienen que pasar por esto. Pues lo están haciendo de maravilla.