NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Hermético, el Athletic pierde

A buen seguro que Josu Urrutia tragó saliva en el minuto de silencio en memoria de los fallecidos vinculados al club. Más allá de los que salieron en pantalla, imagino que recordó a su mano derecha, mentor y amigo Andrés Arana. El lekeitiarra no ha cambiado de estrategia: sigue firme en sus convicciones filosóficas, con el Athletic como máxima aspiración de quien se calce sus botas. No va a dar un paso atrás en ello mientras sea presidente. Lo saben el vestuario, el público y los medios. Lo de Llorente y cía le ha dejado herido.

Creo que el Athletic que tiene en su cabeza encaja con el que muchos sueñan. Hay que estar ahí, en primera fila, para rumiar la decepción de ver cómo se desmantela un equipazo, con un técnico líder al frente. Quizás por culpa de todos. El ciclón post-Bucarest le ha convertido en más desconfiado y entiendo que se vuelque en Lezama, donde hay tarea de concienciación. Urrutia gana mucho cuando se muestra tal cual es, en esa distancia corta en la que convence y admite, aunque no comparta, los diferentes puntos de vista sobre el club que le quita el sueño. Tiene el deber, en los dos años de mandato que le restan, de que el Athletic no sea tan hermético e indescifrable, que rezume alegría, optimismo y buen rollo. Vender el día a día del club (gestiones con Tebas incluidas) es sano.