En el fútbol todo cambia de un día al otro. Los análisis que parecen hoy sólidos, sesudos, irrefutables mañana pueden quedar en el ridículo. Es especialmente aconsejable tener estos conceptos en mente y proceder con mucha cautela al hablar sobre el actual Real Madrid.
Pero hoy -hoy- la cosa no pinta bien. El equipo parece el de los Galácticos, menos el carisma. Éste tiene a Cristiano Ronaldo; el otro tenía a Zidane, Figo, Beckham, Raúl, Roberto Carlos y al brasileño Ronaldo.

El problema de aquel conjunto de estrellas, como vimos al final, fue que carecía de filosofía de juego, carecía de un entrenador fuerte y decidido y dependía de la genial improvisación. Lo mismo podemos decir del equipo que acaba de perder contra el Atlético de Madrid y que no mereció ganar al Elche. Lo que reina es la indefinición, la incertidumbre. El entrenador transmite serenidad y sabiduría cada vez que habla pero si uno se fija en lo que dijo, con igual aparente serenidad y sabiduría, hace una semana o un mes lo que ve es que cada vez expresa un concepto diferente. Que la posesión es el principal objetivo; que mejor tres pases que 30; que bombear balones al área es la solución.

El análisis hoy, en resumen, es que si las cosas no cambian esta temporada acabará siendo la madre de todos los fiascos. El equipo galáctico también costó una fortuna y al final fracasó pero al menos ilusionaba verles jugar. Sin embargo, ¡nil desperandum! Hay motivos para no perder la fe. El actual equipo multimillonario no brilla como el de Zidane pero está más compensado. Posee excelentes defensas, con muy dignos suplentes, por no hablar de los porteros. Posee centrocampistas completos y fuertes, y el mejor de ellos, Xabi Alonso, está por llegar. Isco es una joya; Cristiano, no hay nada más que decir; y Bale, aunque nunca justifique esos 100 millones, dará mucho miedo a defensas rivales y muchos goles al Madrid.

No olvidemos que hace un par de semanas, en la Champions League, este mismo Madrid le ganó 6 a 1 al Galatasaray en Estambul. Esto no lo hace un equipo cualquiera. Hoy andan un poco confusos pero la temporada recién arranca y la materia prima existe para forjar un equipazo capaz de ganar a todos.

Pena que no vendieron a Benzema y no ficharon al uruguayo Luis Suárez del Liverpool. Pena que dejaron irse a Özil. Pero bueno. Mejor. Así hubiera sido demasiado fácil.